Prepara el mejor, antibiótico casero y protégete de infecciones
Las enfermedades provocadas por el frío o que aparecen en épocas de frío suelen ser bastante comunes y a veces creemos que todo lo que hacemos para evitarlas o para curarnos no es suficiente.
De modo que buscar alternativas para combatir los resfríos, la tos y la gripe es siempre una buena idea y en esta oportunidad, para que agregues un nuevo remedio natural a tu lista queremos darte a conocer los usos y beneficios de la miel de ajo.
Ya todos conocemos las ventajas que encierra la miel, que viene siendo utilizada desde la antigüedad no sólo por su sabor dulce y atrapante, sino también por sus propiedades curativas tanto de uso interno como externo. En cuanto al ajo, al que en algunas culturas se lo denomina “el oro blanco”, sólo podemos nombrar bondades en relación a los efectos que produce en el organismo cuidándonos de infecciones gracias a sus propiedades antisépticas, anti bacterianas y antifúngicas.
Si bien el ajo en algunos casos puede ser rechazado debido a su aroma intenso sabemos que hace importantes aportes a la salud ayudando a reducir el azúcar en la sangre y bajando los niveles de presión arterial. También se ha utilizado con éxito en el tratamiento de la malaria y aumenta las defensas estimulando la inmunidad en personas afectadas de sida.
Este remedio casero fue desarrollado por un médico estadounidense que probó combinar estos dos “superalimentos”, obteniendo un remedio potente y efectivo para el tratamiento de enfermedades relacionadas con el aparato respiratorio.
Para prepararlo vas a necesitar:
- 1 cabeza de ajo
- ½ litro de miel
- 1 frasco de ½ litro
Preparación:
El ajo es mucho más efectivo crudo porque concentra mejor sus propiedades, es decir, que para preparar este remedio casero simplemente vamos a pelarlos, lavarlos y picarlos finamente para que libere alicina, que es la sustancia que concentra la mayor parte de sus propiedades.
Una vez que hayas picado los ajos colócalos dentro del frasco y agrega la miel.
Procura conseguir miel orgánica para obtener mejores resultados. A medida que vas introduciendo la miel en el frasco es posible que se formen burbujas de aire que es necesario eliminar, utiliza un cuchillo o cualquier otro elemento para deshacerte de estas burbujas.
Cierra el frasco de manera hermética y coloca una etiqueta en el frente con la fecha de elaboración. Guárdalo en un lugar fresco y seco durante 20 días para que desprendan todas sus propiedades y al cabo de ese tiempo ya podrás utilizarlo.
Puedes agregar esta miel de ajo a tus infusiones o simplemente tomar una o dos cucharadas para aliviar los síntomas de la gripe y resfríos.
Puedes conservar este remedio casero por un lapso de tres meses.
De modo que buscar alternativas para combatir los resfríos, la tos y la gripe es siempre una buena idea y en esta oportunidad, para que agregues un nuevo remedio natural a tu lista queremos darte a conocer los usos y beneficios de la miel de ajo.
Ya todos conocemos las ventajas que encierra la miel, que viene siendo utilizada desde la antigüedad no sólo por su sabor dulce y atrapante, sino también por sus propiedades curativas tanto de uso interno como externo. En cuanto al ajo, al que en algunas culturas se lo denomina “el oro blanco”, sólo podemos nombrar bondades en relación a los efectos que produce en el organismo cuidándonos de infecciones gracias a sus propiedades antisépticas, anti bacterianas y antifúngicas.
Si bien el ajo en algunos casos puede ser rechazado debido a su aroma intenso sabemos que hace importantes aportes a la salud ayudando a reducir el azúcar en la sangre y bajando los niveles de presión arterial. También se ha utilizado con éxito en el tratamiento de la malaria y aumenta las defensas estimulando la inmunidad en personas afectadas de sida.
Este remedio casero fue desarrollado por un médico estadounidense que probó combinar estos dos “superalimentos”, obteniendo un remedio potente y efectivo para el tratamiento de enfermedades relacionadas con el aparato respiratorio.
Para prepararlo vas a necesitar:
- 1 cabeza de ajo
- ½ litro de miel
- 1 frasco de ½ litro
Preparación:
El ajo es mucho más efectivo crudo porque concentra mejor sus propiedades, es decir, que para preparar este remedio casero simplemente vamos a pelarlos, lavarlos y picarlos finamente para que libere alicina, que es la sustancia que concentra la mayor parte de sus propiedades.
Una vez que hayas picado los ajos colócalos dentro del frasco y agrega la miel.
Procura conseguir miel orgánica para obtener mejores resultados. A medida que vas introduciendo la miel en el frasco es posible que se formen burbujas de aire que es necesario eliminar, utiliza un cuchillo o cualquier otro elemento para deshacerte de estas burbujas.
Cierra el frasco de manera hermética y coloca una etiqueta en el frente con la fecha de elaboración. Guárdalo en un lugar fresco y seco durante 20 días para que desprendan todas sus propiedades y al cabo de ese tiempo ya podrás utilizarlo.
Puedes agregar esta miel de ajo a tus infusiones o simplemente tomar una o dos cucharadas para aliviar los síntomas de la gripe y resfríos.
Puedes conservar este remedio casero por un lapso de tres meses.
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